Tetrasílabos
de oro
Sin decoro
lo valoro.
Me enamoro,
¡oh!, tesoro.
Sin desdoro
lo devoro.
Y lo adoro
más que un moro.
Mi indecoro,
bis de loro.
Rememoro
sin un coro.
Más aforo
donde moro.
Todo doro
y mejoro.
¡Cómo añoro,
cómo imploro!
Sin él lloro
cada poro;
sueño afloro
como toro;
desmejoro
y empeoro.
Me demoro
y me acaloro.
Y me atoro
o desfloro.
No deploro,
lo atesoro.
Óyeme, foro:
quiero al oro.